Palacio Nacional de Mafra

 

Publicado en 1982, “Memorial del convento” es la novela más icónica de José Saramago. Traducido a más de 20 lenguas, con más de 50 ediciones, trata de un tema recurrente en la obra del escritor: la oposición entre ricos y pobres, explotadores y explotados. Su acción transcurre en el siglo XVIII, durante el reinado de D. Juan V, rey que mandó construir el Convento de Mafra, obra gigantesca, financiada por el oro de Brasil, entonces una colonia del imperio portugués. La oposición entre la megalomanía real y la miseria del pueblo que construyó aquel monumento está presente en toda la obra, bajo la pena mordaz de Saramago. Y, en medio, cómo no, una arrebatadora historia de amor.

El Palacio Nacional de Mafra es desde 2019 Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO. 

Mandado construir por el rey D. Juan V, es una construcción del siglo XVIII, formada por el Palacio Real, una Basílica, un Convento y un Bosque. Sobresalen 2 Carrillones, 6 Órganos históricos, la Biblioteca y una Enfermería ochocentista.

El Palacio Real ocupa el piso noble del edificio de Mafra y los 2 torreones, estando el del norte destinado al rey y el del sur a la reina, unidos por una larga galería de 232 m – el mayor pasillo palaciego de Europa.

Este edificio, con unos 40.000 m2, albergó un convento franciscano (300 frailes) – destacando el Campo Santo, la Enfermería, la Sala Elíptica (capitular), la Sala de los Actos Literarios, la Escalinata y el Refectorio. 

El Real Edificio posee 2 carrillones compuestos por 98 campanas – los mayores de la época. Los 6 Órganos de la Basílica configuran un patrimonio único en el mundo.

 

Su importante Biblioteca está considerada una de las más bellas del mundo.

 

Construido bajo el reinado del rey Juan V, cerca del Monasterio de Mafra, idealizado como un parque de ocio para el rey y su corte. Se extiende por más de 800 hectáreas y está flanqueada por una muralla con 21 kilómetros para preservar la vida silvestre y su antiguo bosque. Encontrará pinos, eucaliptos y diferentes variedades de robles, entre otros una castaña de Guinea, una Olaia y un alcornoque con más de 300 años. Con respecto a la vida silvestre, las mangostas, los zorros, los genetas, los tejones, las ardillas, los conejos, los venados, los ciervos, las cabras, los venados, los jabalíes, etc, y también las aves, las más representativas son el águila de Bonelli, el búho, paloma norteña y halcónes. Se ofrecen diversas actividades en la naturaleza, encontrará muchas rutas pedestres y en bicicleta de montaña, visitas guiadas en vehículo eléctrico y un pequeño tren. También talleres de apicultura y una actuación con aves de presa.