Ven a conocer la casa de los lisboetas con cuatro patas y varias aletas. Su misión de conservación de los hábitats ha tenido mucho éxito en la ayuda a la reproducción de especies.
El jardín zoológico de Lisboa, inaugurado en 1884, es uno de los lugares más apacibles e interesantes para visitar en Lisboa.
Además de los esfuerzos realizados para crear hábitats cada vez más naturales para las distintas especies, sus programas de conservación y estudio han surtido resultados positivos.
Las crías que aquí nacen son siempre un motivo de celebración nacional.
El jardín, que también promueve la preservación de numerosas especies vegetales, se convierte así en un espacio donde las familias van para divertirse, para aprender algo nuevo y para sentir absoluta tranquilidad en una de las zonas más frecuentadas de la ciudad.
Ven a conocer el Zoo, que se ha sabido reinventar y reposicionar, evolucionando de un escaparate de animales exóticos, a uno de los agentes más activos en la conservación de animales y hábitats.